Como muchos saben, y si no se están enterando ahora, empecé el 2019 caminando. Si, caminé 118 km desde Sarria (en Lugo, España) hasta Santiago de Compostela. Era un sueño que tenía hace mucho tiempo y lo pude cumplir a pesar que el segundo día pensé que no iba a poder caminar más. En esos 6/7 días aprendí muchísimas cosas y se las quiero compartir.
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Que el Camino no se organiza, el Camino sucede.
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Que aunque vayas solo nunca vas a estarlo.
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Que el que menos tiene, más te da.
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Que tenés que llevar algo para intercambiar con
otros, no importa si es un caramelo tradicional de tu país o algo hecho por vos…lo
que importa es el acto de compartirlo.
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| Señaladores de libro bordados a mano. |
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Que hasta el más experimentado se cansa.
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Que las ampollas te van a salir seas
experimentado o primerizo.
· Que te pueden salir ampollas nuevas arriba de ampollas viejas.
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Que la vaselina ayuda, pero tampoco hace
milagros.
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| Apósitos salvadores para cuando salen ampollas indeseadas. |
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Que podés caminar solo o en compañía.
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Que en el Camino hay todo tipo de animales.
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| Ovejas peregrinas. |
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Que cada una hora es bueno parar, sacarse la
mochila y descansar.
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Que 1km hace la diferencia y que 500gr hacen MÁS
la diferencia.
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Que el Camino no es una carrera y no gana el que
llega primero.
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Que nunca te vas a quedar sin comer.
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Que nunca vas a extrañar tanto la ducha de tu
casa.
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Que el bastón (o palo de trekking) no es de
facha, ayuda de verdad.
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| Mi bastón lo encontré en la primer subida el primer día y no lo dejé hasta llegar a Santiago. |
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Que se puede vivir con 10€ por día, incluso con
menos también.
· Que los peregrinos que duermen en la cama de abajo se ponen filosóficos cuando se acuestan y escriben cosas.
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Que hasta el que no le gusta hablar con la gente
(como yo), termina contando su vida a otras personas que conoció 2km atrás.
· Que las flechas están en todos lados.
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| Sigan las flechas y nunca (o casi nunca) se van a perder. |
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Que los kiwis nacen de los árboles y que no sólo
se cultivan en Australia. En el Camino también hay.
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Que podés prescindir de muchas cosas.
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Que si el primer día te das cuenta que tenés 3kg
de cosas innecesarias, las podés enviar por encomienda a Santiago y te la
guardan hasta que llegás.
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Que si no te conocés a vos mismo, el Camino es
una buena forma de hacerlo.
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Que si llegás de los diez primeros del día a
Santiago te dan un vale para almorzar en el Parador de los Reyes Católicos.
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| Catedral de Santiago de Compostela. |
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Que en los albergues puede hacer mucho frío o
mucho calor, no importa la estación del año en la que hagas el Camino.
· Que no toda el agua que sale de fuentes es potable, sólo la que tiene el cartel “agua potable – agua apta para el consumo”.
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| Fuente de agua durante el Camino. |
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Que la bolsa de dormir es clave. Podés no llevar
“crema súper hidratante para pies”, pero la bolsa de dormir es lo primero que
tenés que poner en la mochila.
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Que las pulgas pican a las personas y que
siempre tenés que tener a mano un repelente contra ellas.
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Que Corea del Sur es uno de los países con más
peregrinos en el Camino en enero.
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Que los coreanos se volvieron “adictos al Camino”
después de que Kim Hyo Sun escribiera una trilogía que fue best seller.
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Que el último que se acuesta apaga la luz de la
habitación y el primero que se levanta la prende (a menos que sean las cinco de
la mañana – Si, los coreanos se despiertan temprano).
Si hicieron el Camino y piensan que me faltó alguna enseñanza los leo en mis comentarios. Y si no lo hicieron, están leyendo esto y les dió ganas de hacerlo, también los leo en mis comentarios.
Yo no viajo por el destino, viajo por el camino.
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