Veo damascos y lo primero que se me viene a la cabeza es General Alvear, Mendoza (Argentina). De ahí son mis abuelos y ahí nacieron mi mamá y mi papá. Toda mi familia es “alvearense”. Los hermanos de mi papá son finqueros, nunca en mi vida comí fruta más rica que la de mis tíos. Recuerdo ir a pasar el fin de semana allá y volver con el baúl del auto lleno de fruta que después mi mamá la convertía en dulce y así teníamos para todo el año, LITERAL.
Hoy
pasé por el mercado, vi unos damascos y, aunque todavía no es plena
época, los compré. Tenía ganas de hacer dulce casero, pero todos
sabemos que el dulce es azúcar al 100% y yo ahora estoy en plan
saludable. Decidí hacer un dulce sin azúcar y ¡me salió igual al
comprado! El azúcar no sólo sirve para endulzarlo, también tiene
dos funciones muy importantes. Por un lado, actúa como conservante
y, por el otro, ayuda a la gelificación para conseguir una textura
espesa en la preparación. Acá estaba mi problema: ¿Cómo hacer un
dulce casero sin azúcar? Con un polvito mágico llamado Agar-Agar
que lo pueden encontrar fácilmente en supermercados o dietéticas.
Les dejo la receta para que prueben hacerlo y después me cuentan
cómo les salió. Pueden elegir la fruta que más les guste, la que
esté más madura e incluso pueden hacer combinaciones y crear nuevos
gustos de mermelada. Recuerden que es mejor usar las frutas de
estación.
MERMELADA
CASERA SIN AZÚCAR
Ingredientes:
500
gr de la fruta que quieran.
1
cda de jugo de limón (sirve para que la fruta no se oxide).
Medio
vaso de agua.
Media
cucharadita (2gr) de agar-agar.
Stevia
en polvo a gusto (entre 3 y 5 sobres).
Paso
a Paso:
Lavamos,
pelamos (si es necesario) y cortamos la fruta. La ponemos en una olla
con el agua y el jugo de limón y la procesamos con la mini pimer
hasta obtener un puré. Incorporamos el agar-agar (disuelto en agua
fría) y llevamos a fuego hasta hervir, siempre revolviendo.
Cocinamos dos minutos y retiramos del fuego. Envasamos en frascos,
dejamos enfriar a temperatura ambiente y luego a la heladera. Como no
tiene azúcar no dura más de una semana (pueden hacer la mitad de la receta si piensan que no lo van a comer).
Les
dejo también la receta de unos MUFFINS DE ALMENDRA Y DAMASCOS.
Utilicé la mermelada para rellenarlos, pero pueden hacerlos sin
relleno o ponerle el que hayan hecho ustedes. Son muy fáciles,
ricos, quedan esponjosos y muy húmedos.
MUFFINS
DE ALMENDRA Y DAMASCOS
(Salen
8 unidades)
Ingredientes:
125
gr de manteca.
100
gr de azúcar.
1
huevo.
75
gr yogurt natural (½ pote)
150
gr de harina leudante con una pizca de sal.
Esencia
de almendras o esencia de vainilla.
50
gr de almendras picadas más 8 unidades para decorar.
Mermelada
para rellenar (opcional).
Paso
a Paso:
1) Precalentar
el horno a 180º y preparar el molde para los muffins: enmantecado y
enharinado o sin nada y con los pirotines especiales de papel.
2) Batir
la manteca con el azúcar a blanco (alrededor de 5 minutos con
batidora eléctrica). Agregar el huevo y seguir batiendo hasta
obtener una preparación lisa.
3) Incorporar
el yogurt, la esencia y de a poco el harina cernida, pero dejando de
lado la batidora y utilizando un batidor de alambre (batidor de
globo).
4) Picamos
las almendras con un cuchillo, las mezclamos con dos cucharadas de
harina y, finalmente, las incorporamos a la preparación.
5) Llenar
los moldes hasta la mitad con la masa, agregar una cucharada de
mermelada y cubrir con un poco más de masa hasta llenar tres
cuartas partes. Espolvorear con azúcar y decorar con una almendra.
6) Llevar
a horno y cocinar entre 20 y 25 minutos.
Hacer
dulce casero me trae muy lindos recuerdos de mi infancia, de mi
familia y de cómo siempre la comida fue (es y será) el hilo conductor para todo en mi vida.
Cocinen
rico y disfruten el momento.
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