Ya pasaron casi 15 meses desde que llegué a Italia. Y entre Torino, en la región del Piamonte y Pisa, en la famosa Toscana, supe adaptarme a esta cultura que es tan parecida a la nuestra. Además de aprender su idioma y dialectos, conocer su gastronomía, sus costumbres y visitar muchos de los lugares que este país nos puede ofrecer, me inculqué con curiosidades de todo tipo que ya mismo se las paso a contar.
Cuando empecé a estudiar el
italiano no me fue tan difícil como pensaba. Tal vez porque ya habia estudiado
francés y tienen la misma gramática. Es un idioma que siempre me gustó escuchar
y que nunca pensé que lo iba a terminar hablando. Es también un idioma que
tiene miles de dialectos, casi tantos como provincias en su territorio, pero el
italiano tal y como lo conocemos es en realidad el dialecto florentino que
pasó a convertirse en el idioma oficial de todo el país.
Los colores de la bandera
tienen un significado. El verde representa la esperanza, el blanco representa la fe, y el
rojo señala la caridad.
Italia y sus
universidades. La universidad de Bolonia es la más antigua del mundo, fue fundada
en 1088. Otras tres universidades italianas están en el top ten de las más
antiguas del mundo: la de Padua, la de Nápoles y la de Siena.
En Italia no hay Starbucks. Si han tenido la posibilidad de
viajar a las grandes ciudades de Italia seguramente se habrán quedado
sorprendidos al darse cuenta que no existe esta típica cadena de cafeterías. Es
que los italianos son tan nacionalistas que no podían permitir tener una copia
americana de sus tradicionales bares. Por lo menos hasta ahora. En septiembre
próximo se inaugurará el primero. Pero no será un Starbucks cualquiera, sino
uno de los 5 “Starbucks Roastery” del mundo. Estará en Milán y se une a los ya
existentes en Seattle y Shangai. También planean abrir uno en Nueva York. Roastery
viene del inglés “tostador”. Y es que este tipo de locales se trata de espacios
donde el cliente no sólo va a poder degustar su café sino también va a poder
ver su proceso y hacer degustaciones.
Italia es el país de los volcanes.
Ningún
otro país en Europa tiene tantos volcanes como Italia. Hay
tres grandes volcanes activos: el Etna, el Stromboli y el Vesubio. Y 29
inactivos. Uno de ellos, el Etna, fue declarado patrimonio de la humanidad por
la Unesco en el 2013.
El Etna en erupción visto desde una playa en Catania. |
Si tuviéramos que pedir
un tiramisú en nuestro idioma por ahí deberíamos pedirlo como un “levántame”
(Tira- mi- su). Este postre que tanto me gusta (háganme acordar que después les pase la receta) es el más famoso de
Italia y tiene su origen en el norte del país. Unos dicen que nació en 1971 en
el restaurante La Beccherie, en Treviso, después de que su dueño pasara más de
dos años perfeccionando la receta de los antiguos burdeles de la zona. La
historia cuenta que en la antigüedad los burdeles ofrecían este postre a los hombres
después de una larga noche para que tuvieran fuerzas para continuarla. Esto
se debe sus ingredientes principales: huevos, azúcar, chocolate y café. Otra historia cuenta que fue inventado en Turín a
mediados del siglo XIX como pedido del primer ministro de Italia en ese
momento, Camillo Cavour. Él decía que necesitaba algo que lo “levantara”
mientras se enfrentaba con la tarea de unificar la península italiana.
¿Y la pizza? Como se pueden imaginar, nació en Nápoles. Fue en 1830,
en la Antica Pizzeria Port’Alba, que es la más antigua del mundo. Hoy en
día todavía existe en el centro histórico de Napoles. Adivinen de qué están
revestidos los hornos de este restaurante.: con rocas de
lava del volcán Vesubio. La pizza Margherita, la más famosa de todas, tiene
este nombre gracias a la reina Margherita de Francia. Ella después de su visita
a Nápoles en el 1889 llamó al maestro pizzero y le dijo que le cocinara tres
pizzas en su palacio porque estaba cansada de la comida francesa. Como a la reina le encantó la que tenía salsa de tomate, mozarella y
hojas de albahaca el cocinero le dijo que se la dedicaría y le puso su nombre.
Hay más italianos en
Argentina que en Italia. Bueno, no es literal aunque podría serlo. Con 61
millones de habitantes, Italia es el quinto país más poblado de Europa. Pero el
número de descendientes italianos que viven en el extranjero es mayor: la
mayoría están en Argentina, Brasil y Estados Unidos. Después de la
masiva inmigración de italianos, sobre todo a América, entre
1861 y la década de 1920 se estima que más de un 60% de argentinos tienen algún
descendiente italiano.
Torino (Turin) es una ciudad desconocida por los turistas
que prefieren visitar Roma, Florencia o Venecia. Pero para mi es y será una de
las mejores cosas que me pasó en la vida. Podría escribir horas y horas y esta
entrada se volvería muy larga, por eso sólo les voy a contar lo que más me llamó la atención de esta hermosa ciudad.
Mole Antonelliana, Museo Nacional del Cine. |
Piazza Castello, Centro de Turin. |
En sus orígenes la ciudad se llamaba: “Civitas Augusta Taurinorum”, que significa: “la ciudad fundada por el emperador Augusto poblada por la tribu de los taurini”. Los taurini eran una tribu que vivía en las montañas y se dedicaba a la crianza de los toros. Por eso el toro es el símbolo de la ciudad y lo podemos ver en todos lados: casas, esculturas, fuentes, banderas y hasta en el escudo del equipo de fútbol.
Turín fue la primera capital de la Italia moderna. Luego se
trasladó a Florencia y finalmente la que conocemos todos: Roma.
En la Catedral de Turin está la “sabana santa”: una tela de lino que muestra la imagen de un hombre. Es la tela con la
que envolvieron a Jesús tras su muerte en la cruz. Y aunque muchos opinan que las
manchas son falsas, para ola religión católica es uno de sus objetos más valiosos.
Los grisines que tanto nos
gustan y que esperamos ansiosos cuando vamos a comer a un restaurante nacieron
en Turin. La historia cuenta que fueron un regalo de un panadero turinés al
duque Víctor Amadeo II de Saboya en 1668. Él no podía comer miga de pan por
problemas digestivos y estos palitos eran tan finos y crujientes que no se pudo
resistir.
Ahora vivo en Pisa y lo primero que me preguntan todos es qué tan real es lo de la "la torre inclinada".
La torre de Pisa
estuvo cerrada más de 10 años. Originalmente
la Torre de Pisa tenía que estar vertical. Pero sus cimientos al no ser tan
profundos (sólo tres metros) provocaron que el terreno comenzara a ceder y por
eso la torre comenzó a inclinarse. Entre 1922 y 1943 el país fue
gobernado por Benito Mussolini y una de sus ocurrencias más locas fue enderezar
la torre. No lo consiguieron. Sigue inclinada y en pie. Entre 1990 y el 2001 la
cerraron para hacerle trabajos de refuerzo a los cimientos. Dicen que colocaron
andamios, amurallaron la torre y no dejaban acercarse a los turistas. No puedo
imaginarme la Piazza dei Miracoli en esa época.
Keith Haring es un famoso artista que antes de morir pintó su última obra pública en Pisa. Se llama "Tuttomondo" y es un mural de 180 metros cuadrados. Se pueden ver 30 figuras que están tan perfectamente encastradas que parece un gran rompecabezas de colores.
En Pisa el año nuevo se festeja dos veces. Si, así como lo leen. Una el 31 de diciembre y la otra el 25 de marzo. Siglos atrás Pisa fue parte de la gran República Marítima y su calendario era un poco distinto del que utilizamos ahora. Según este antiguo calendario el año comenzaba el día de la Anunciación de María, el 25 de marzo. Pero no duró mucho porque en el 1749 el Gran Duque de Toscana ordenó que todos los estados de la región siguieran el mismo calendario, el gregoriano y así el año nuevo se celebra la noche del 31 de diciembre. Igualmente los pisanos no dejaron atrás esta tradición y todos los 25 de marzo hay fiestas y desfiles en el centro de la ciudad además de los famosos fuegos artificiales.
Atardecer desde el Ponte di Mezzo. |
Cuando llego a una nueva ciudad me gusta inculcarme con este tipo de curiosidades. Es la manera de sentirme un poquito más local.
Viajen mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario